Las bolsas de Europa sufren fuertes caídas, afectadas por el aumento de casos de COVID-19 y el endurecimiento de los confinamientos. Los principales mercados del Viejo Continente afrontan caídas de más de 2%, lastradas por el descenso de los futuros estadounidenses y del petróleo, así como por el impacto económico que puedan tener las medidas para contener el avance de la segunda ola de coronavirus

Las principales bolsas europeas iniciaron con pérdidas del más del 2% poco después de la apertura, afectadas por el descenso de los futuros sobre acciones estadounidenses y del petróleo, así como por el impacto económico que puedan tener las medidas que se están aprobando para contener el aumento de los contagios por coronavirus, según datos del mercado.

A las 10.15 horas (GMT), destacaba la caída del 3,19% de Frankfurt, mientras que París cedía el 2,89%; Milán el 2,84%; el índice Euro Stoxx 50 el 2,69%; Madrid el 2,4%; Londres el 1,91% y Zúrich el 1,72%.

Los futuros estadounidenses descendían el 1,25% y condicionaban la evolución de las bolsas europeas. La caída entre las plazas del Viejo Continente se produce luego de que Wall Street cediera el 0,8% el martes tras descender la confianza de los consumidores y de que no gustaran los resultados de algunas empresas farmacéuticas, sumado a que las cuentas de Microsoft fueron recibidas con cautela por los inversores.

En Asia, Tokio ha bajado el 0,29% y Hong Kong el 0,5%, en tanto que Shanghái subía el 0,46%.

También incidía negativamente en el comienzo de la negociación la bajada del precio del petróleo: el barril de Brent descendía el 2,7% y cambiaba a 40,5 dólares, así como la depreciación del euro el 0,35%, hasta 1,175 dólares.

La onza de oro troy bajaba a 1.907 dólares con una caída del 0,25%. El interés de la deuda alemana a largo plazo se situaba en el -0,64%.

Los descensos en todos los mercados europeos de renta variable se explican, en gran medida, a los temores de un nuevo confinamiento nacional en Francia y a la imposición de medidas más estrictas en otros países para combatir el aumento de los casos de coronavirus.

El Gobierno francés de Emmanuel Macron analiza la posibilidad de un nuevo confinamiento nacional a partir de la medianoche del jueves, según informó la emisora BFM TV, aunque aplicaría medidas ligeramente más flexibles que las del aislamiento de dos meses que comenzó a mediados de marzo. El presidente Macron ofrecerá una declaración televisada más tarde, según su gabinete.

Mientras que la canciller de Alemania, Angela Merkel, piensa cerrar todos los restaurantes y bares a partir del 4 de noviembre, según un proyecto al que tuvo acceso Reuters, y el diario The Telegraph comunicó que el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se encuentra bajo presión para aplicar nuevas restricciones.

“Los mercados globales se ven increíblemente nerviosos, la mezcla del aumento de casos y muertes de COVID-19 y el posible cierre total en Francia, añaden esto a la incertidumbre antes de las elecciones de Estados Unidos y plantean un telón de fondo muy complejo”, aseguró John Woolfitt, de Atlantic Capital Markets.

“No espero que esto sea a largo plazo, pero el nerviosismo continuará hasta que las elecciones terminen y se estabilicen los números de COVID-19”, agregó.