En un escrito, su excompañero de muchos años Víctor Gómez Casanova lo define como un enfermo lector hasta el cansancio, rebelde y agresivo frente a la injusticia, sensible al dolor ajeno, leal y solidario como nadie.
Un hombre difícil, con un temperamento que no todo el mundo podía comprender, pero de una inmensa e incomparable bondad que superaban con creces cualquier defecto que como ser humano podía tener.
Así era el fenecido comunicador Álvaro Arvelo hijo, quien este falleció el 21 de septiembre de 2023, en el Centro Médico Real, tras perder la batalla contra el cáncer.
Amante de la comunicación y trabajador incansable de la misma, pese a sus quebrantos de salud se mantuvo activo en el programa que lideró por varias décadas; hizo su último programa el pasado viernes 15 de septiembre.
Era un periodista investigador muy agudo. Según cuentan sus excompañeros de ejercicio periodístico, el fenecido comunicador Álvaro Arvelo hijo tenía por costumbre andar con un lápiz y una libreta.
Nació en Santo Domingo el 1 de noviembre de 1940. Estuvo casado con la cantante Olga Lara, aunque su matrimonio terminó en divorcio.
Su estilo irreverente y sin filtros fue su fortaleza como su debilidad. Esa manera de hablar le hizo protagonizar varios enfrentamientos, demandas y suspensiones por parte de la Comisión de Espectáculos Públicos y Radiofonía. En el 2019 fue condenado por difamación e injuria al maestro Rafael Solano, al decir públicamente que la canción ‘Por Amor’ no fue compuesta por él, sino por Manuel Troncoso, por lo que fue condenado al pago de 1.5 millones de pesos y tres meses de prisión suspendida en la cárcel Modelo de Najayo. También es recordado sus constantes ataques hacia Juan Luis Guerra y varios expresidentes.
Álvaro Arvelo hijo (Alvarito) fue sin duda, una de las voces más reconocidas y controvertidas de la radio en la República Dominicana. Durante su ejercicio profesional de más de cincuenta años tuvo una trayectoria de buen periodista de prensa escrita, sin embargo, es a través del programa radial El Gobierno de la Mañana, cuando alcanza el ‘boom’ por su amplio conocimiento de cultura general y su controversial estilo, que lo llevó a ganar el apodo de La enciclopedia humana.
Era conocido por ser puntual y sus frases “y… amanecemos hoy…”, para dar inicio al programa radial, “¡Cuidadito compai gallo!”, para dar notoriedad o advertir sobre un problema grave y ¡“Llevártelo Cundo”!, para sacar del aire a un invitado o un oyente o irse a comerciales.
Su leída columna “Tema Deportivo” en el periódico El Caribe apareció en 1958, especializándose en comentarios y análisis deportivos.
Durante muchos años publicó, primero en El Nacional y después en un suplemento de El Caribe, la columna sabatina “Comentario de Cine”. Fue una figura del ajedrez (juego-ciencia). Con apenas 19 años fue presidente de la Federación Dominicana de Ajedrez (FDA), el más joven del país que alcanza esa posición.
En junio de 1972 publicó su primer libro con el título “Anecdotario”, tenía 30 años. En 1977 publicó su segundo libro “100 Temas Deportivos”. Ya para 1968, junto a Félix Acosta Núñez, fundó en Rahintel el programa “TV Deportes. En 1990 pasó a formar parte del programa el Gordo de la Semana, que producía Freddy Beras Goico, tenía una sección con carácter ilustrativo de los más variados temas.
Después de más de 20 años colaborando y trabajando para el diario El Caribe, dejó este medio en 1977 para pasar a ser editor deportivo de Publicaciones Ahora.
Reconocimientos
Por sus méritos durante su larga carrera, fue condecorado por el presidente Joaquín Balaguer en 1979 con la orden Duarte, Sánchez y Mella en grado de Caballero. En el 2001 la sala capitular del Ayuntamiento del Distrito Nacional lo declaró Hijo Meritísimo de la Ciudad de Santo Domingo y en ese mismo año fue condecorado por el expresidente Hipólito Mejía con la orden Duarte, Sánchez y Mella con la Orden de Comendador.
En 2022, la Cámara de Diputados le entregó un pergamino de reconocimiento por su destacada trayectoria profesional como periodista y cronista deportivo en República Dominicana.
